sábado, 30 de abril de 2011

Gaspar Ruiz, un arquetipo del patriotismo chileno




                                                               Por: Jaser Suarez Santana  #21

Desde el inicio de los tiempos, la humanidad se ha tornado a un universo atiborrado de tecnología y moda, dos factores que han causado en cada individuo un elevado grado ignomínico que ha aplacado en su totalidad la parte del raciocinio común. Además, creer que una persona sea capaz de intolerar y evadir todo lo que le degrada y perjudique, es única y exclusivamente un hecho de ignorancia, por cierto, algo que también mantiene estupefacto el desarrollo venidero de nuestras sociedades. De igual forma, debemos tener en cuenta que si en épocas remotas existió la esclavitud, nunca fue abolida, puesto que aun en nuestras sociedades civilistas sigue teniendo vigencia esa esclavitud mental que tanto nos ha hecho pensar y comportar como unos verdaderos entes inmorales, indignos, ignorantes y mediocres. Además, no es un secreto para nadie, válgame la redundancia, ver que vivimos tiempos donde nos interesa más el calzado que usamos o un t-shirt a la moda que indagar sobre nuestros orígenes, cultura y descendencias. Todo lo anterior nos sirve como medio de complementación para ver en la novela Gaspar Ruiz, un arquetipo del patriotismo chileno.

Antes de proceder al desarrollo del tema debemos tener en cuenta algunos puntos mediadores que complementaran a su ampliación, como: ¿Quién es el autor?, ¿Qué le motivo a escribir esta novela?  En primer lugar, el autor de la novela “Gaspar Ruiz” es Joseph Conrad, considerado uno de los grandes escritores del mar, gracias a todas las travesías que realizo en el apogeo de su vida juvenil*  según lo detalla en la misma novela. Por otra parte, tenemos la incógnita Qué le motivo a escribir la novela. Bien, para formular la respuesta más efectiva es necesario  llenarnos de sinceridad y admitir que a lo largo del tiempo hemos sido unos verdaderos ignorantes y mal agradecidos ante lo que es el “patriotismo”, sus orígenes y valores que en si encierra, puesto que hoy día rendimos un diminuto y escaso tributo a esas personas que de una u otra forma lucharon con optimismo y vigor para regalarnos un estilo de vida digno, libre, soberano, e independiente de toda dominación extranjera. De ahí deducimos un  buen punto que motivo a Joseph a escribir dicha novela, y es el bajo carisma y entusiasmo que mostramos ante nuestros orígenes compatriotas, por ejemplo: “jóvenes completamente desorientados en cuanto a sus patricios y sus vidas, centros culturales que hacen alusión al patriotismo, en varios casos se encuentran cochambrosos y olvidados. Pero que bueno que autores como Conrad pretenden de una u otra forma mantener en vigencia el recuerdo heroico de esos patriotas que solo reposan en el mundo de la literatura, tal y como lo afirma en su anonimato: “al fin de una lucha armada, solo sobreviven los nombres de algunos caudillos, posteriormente consignados en la historia, de modo que cuando desaparecen del recuerdo vivo de los hombres, perviven calladamente en los libros” (Joseph Conrad, 2011, p.15).

A propósito, la obra Gaspar Ruiz trae a apelación un término de mucha recurrencia al momento de leerla y además va de la mano con la problemática que se vive en la novela; nos referimos al “patriotismo”. Según el diccionario enciclopédico mundial, patriotismo es el amor y conducta propios de una persona hacia su patria o lugar de nacimiento, tal y como lo fue el personaje liberalista que lleva por nombre el titulo de la novela “Gaspar Ruiz”, un gigante forzudo lleno de nobleza, héroe de la desgracia pero también del amor*. Este personaje al junto del general “Santierra”, del que también hace mención la obra, son dos individuos que solo perviven en los libros y sin embargo, formaron parte del elenco liberalista y compatriota que tanto se forzó por independizar a la república de Chile. Es triste que libros históricos, documentales y revistas retóricas hagan tan precarias menciones de individuos que de forma directa e indirecta participaron arriesgando sus vidas para alcanzar la libertad ya sea de Chile o cualquier otra nación. Aunque más triste es ver cómo le atribuimos el honor únicamente a una persona y obviar a un Ruiz o un Santierra que también infundieron valores  a su patria, tal y como admiramos al general “San Martín” o simplemente el más conocido y galardonado en la cultura patriótica Chilena.


Anteriormente, pudimos   contemplar una desequilibrada diferencia que muestran los libros de historia ante la novela Gaspar Ruiz al momento de redactar o narrar hechos de la antigüedad. Además, esta novela se muestra como un medio mucho más eficaz para expresar sucesos remotos, ya que para introducirse se vale de un factor muy importante y evidente, es decir, un narrador o un personaje que de alguna u otra forma influyo en lo que se relata, expresando en forma bien detallada los acontecimientos ocurridos. En este caso el autor Joseph Conrad se valió del recuerdo vivo del general Santierra, dando así una lectura mucho más clara y evidente ante el lector. De igual forma, la obra Gaspar Ruiz nos hace apreciar más lo que leemos,  puesto que utiliza recursos dramáticos y sentimentales que nos llevaran a vivir aun más nuestros antecesores compatriota. Por ejemplo, un pequeño relato del general Santierra sobre esos momentos de ductilidad que tanto caracterizó a Gaspar Ruiz: “Adiós, amigos míos… ¡vayan con Dios! Sepan que les quiero, y digan en Santiago que Gaspar Ruiz, coronel del rey, y la gentuza cochambrosa del Chile, habrá siempre ¡Guerra! ¡Guerra! ¡Guerra!”, una frase  que despierte en cada lector esa intriga e interés en escudriñar la novela y en si presencial la veracidad del patriotismo de Chile.

En conclusión, puede que en ocasiones nos surjan ciertas aflicciones o típicas historias que solo perduran como un simple dicho, ya sea por falta de honradez y valoración ante nuestro patriotismo y sin duda Gaspar Ruiz es un buen ejemplo para todo niño, joven y adulto de lo que es defender nuestros principios patrióticos. Entre tanto, una civilización que se encuentre al descubierto en cuanto al valor que se merece su patria, es simplemente una sociedad cochambrosa y que probablemente se encuentre ante el dominio extranjero, quizás hasta echar a un lado el grato esfuerzo de un Santierra, Gaspar Ruiz o San Martín que en algún momento emprendieron para suplirnos un mejor país. Por consiguiente, es de suma importancia que todos nos unamos en una sola voz para mantener en alto el recuerdo vivo de nuestros orígenes compatriotas para que así donde sea que lleguemos proclamemos que somos una nación libre, soberana e independiente de toda dominación extranjera. Entre tanto, la sed de exploración por cosas desconocidas se irán transformando hasta mutar en una incógnita relevante, es decir, en una fuerte identidad cultural que nos llevara a preguntar si seremos entes representativos de nuestra patria tal y como lo fue Gaspar Ruiz, ¿indagaremos hasta mantener en vigencia el recuerdo vivo de nuestros patriotas ocultos?, no lo sé, lo que sí sé es que de alguna u otra forma hallaremos una respuesta digna si nos atrevemos a leer la novela “Gaspar Ruiz, un arquetipo del patriotismo Chileno”.   

domingo, 17 de abril de 2011

Primavera y sus flores...

Visita de las flores,
búsqueda de amaneceres,
un sueño de colores,
el cantar de aves,
vuelan hacia mí.

 Todo un paraíso,
olores tropicales, sabores de amor.
Todo es diferente...
animado, con un brillo especial,
aquí, respiramos un  paraíso tropical.

Tantas cosas quiero decirte belleza,
que ya no se cual expresar,
contigo, mi vida es diferente,
a tu lado mi axficia  se va.

Cuando leo...

Cuando leo mi mundo toma otro color, todo aquello que creía no poder ver aparece ante mi. 
 Cuando leo, siento como las letras penetran en mis ojos convirtiéndose en sueños realizados.
Cuando leo me siento diferente, me siento capaz de hacer cualquier cosa.
Cuando leo siento como si el protagonista de la historia fuese yo. Cuando leo logro lo imposible, vuelo sin alas camino sin pies.
Un flujo de energía recorre mi cuerpo, me siento infante otra vez.
El aire se vuelve más puro y el sol más radiante. 
Cuando leo soy todo lo que quiero ser, no necesito halagos, pues el libro me ofrece todo aquello que necesito, cuando leo.

Como un...

Como un árbol creciendo, débil, pero preparándome para ser fuerte. Como un mar, amplio, sin límite, ni fronteras.

Como un cielo, inmenso, donde todos alguna vez quisimos llegar. Como un ave, libre, astuta, cariñoso. Como una hoja de papel, blando, pero resistente.

Como un arco iris,  siempre lleno de alegría y mucho color. Como un algodón, que absorbe los problemas de otros, e intenta buscarle solución.

jueves, 17 de febrero de 2011

Ojala que llueva

 

 Ojala que lluevan notas de alegría, que eleven mi canto hasta el supremo piano y al ritmo del violín se destruya mi llanto.

           Ojala que lluevan sinfonías de Beethoven y al compas de why not el cielo se pierda entre miles de colores. Ojala que llueva música, ojala que llueva ya, ojala que llueva jazz y un poquito de chachachá.

           Que llueva blues para que solo en mi mente te encuentres tú, acariciando las nubes con el arpa que dirige el canto de miles de serafines que a una sola voz dicen ojala que llueva una canción.  
           

jueves, 9 de diciembre de 2010

interpretacion argumentativa


Leningrad Dimitri - Shostakovitch

Escuchando la simphonia Leningrad,pude notar que expresa una sensación de dolor, en este caso, frente a la guerra que acontecía en dicha época en Rusia. Cada una de las melodías que complementan esta composición refleja la trajedia que atravezaba este país. Al escucharla se nota un cierto aire militar en los primeros segundos de la canción, que aunque por unos instantes se pierde nuevamente lo retoma. Sin embargo, luego toma un estilo pausado que hace referencia a la trizteza, más tarde ,es una dulce melodía de violín es la que toma posesión de la composisión, con aires de dulzura, inspirando paz y armonía, que de pronto se mancha con un cambio de tono, pero que vuelve y se convierte en una dulce y suave melodía, pero que ahora expresa dolor.

Donde el fuego nunca se paga


Luego de cruzar por el ultimo pasillo, todo era blanco, sin embargo, empezaba a escuchar voces, voces que poco a poco se escuchaban más cerca; no habia espacio determinado, solo voces en el vacio, luego las voces se fueron limpiando, cada vez se escuchaban más claras, hasta que pude distinguir una dulce y suave voz de mujer.

Luego, de repente, las voces se desaparecierón y apareció nuevamente Oscar, ibamos camino al hotel, a la misma habbitación, y allí como en veces anteriores nos entregamos uno al otro. Después todo se desvaneció; volví a escuchar las voces, pero esta vez, abrí los ojos ; cuando reaccioné, un hombre casi desnudo se encontraba encima de mí, grité y el se asustó y se tiró de la cama; al ver a mi alrededor me di cuenta que estaba en un habitación de hospital, el hombre,por su ropa supuce que era un doctor. Estaba asustada , lo único que me salía era preguntar que hacia en ese lugar, en eso entró un enfermera y al escucharme, decidió contarme, me dijo que habia pasado mas de 30 años en coma , tras el impacto que me causó la muerte de mi padre. No podía creerlo, entonces todo aquello que creía haber hecho nunca existió, Oscar fue producto de mi imaginación. La enfermera  se fue y el doctor se quedó, por lo que le pregunté qué hacía sobre mí, me contó que desde que llegue, se habia enamorado de mí, y de vez en cuando, le gustaba hacerme suya; mi mente no pudo asimilar todo eso, la impresión fue tan grande que mi mente no lo aceptó y de nuevo caí en el profundo avismo en el que me encontraba, todo nuevamente se volvió blanco, ya todo era nada.